Es curioso como casi el 90% de las personas que tienen problemas lumbares, culpan de su dolor a situaciones que hacen referencia al estado alterado de sus tejidos (hernia, protrusión discal,…), o sienten la necesidad de realizarse una prueba de imagen, ya sea una radiografía o una resonancia, para de una vez poder conocer la causa de sus problemas.
¿Por qué un paciente llega con estas ideas preconcebidas? ¿Porque se lo ha dicho un medico o un fisioterapeuta?, ¿por una creencia popular (que igualmente viene condicionada por lo que digan los 2 primeros)?
Parece curioso, porque pese a pensarlo, el 90% de los pacientes, es precisamente ese mismo porcentaje de dolores lumbares el que no tienen relación con esta situación clínica. Es probable que, nosotros los sanitarios, seamos los principales culpables de que ese 90% no se convierta en el real 10%.
A continuación mostramos una tabla de una revisión, en la cual establece el numero de sujetos asintomáticos (en porcentaje del total) que muestran una alteración específica en una prueba de imagen.
Atendiendo a estos resultados mostrados en la anterior tabla, parece sorprendente que a día de hoy una persona sea mandada rápidamente a realizarse una prueba de imagen lumbar con el fin de encontrar la causa de su problema.
Esperemos que si es tu caso, no tengas más de 40 años, ya que probablemente te van a diagnosticar un gran problema lumbar, cuando lo único que te ocurre es que, probablemente, has ido cumpliendo años. En muchos de estos casos se llega a establecer la reparación (cirugía) como un tratamiento primario. Por lo tanto, en muchas ocasiones te estas operando únicamente porque tienes 40 años, no por tu dolor lumbar. Esta misma situación se ha mostrado también en el ámbito deportivo, donde columnas asintomáticas, con gran funcionalidad y capacidad para soportar carga son diagnosticadas con alteraciones en pruebas de imagen.
Una prueba de imagen es una foto de una columna (estas diagnosticando viendo una simple foto). En una foto no se puede apreciar los movimientos que realiza diariamente esa columna, como los realiza, la carga que soporta, su tolerancia a la compresión o cizalla, el control motor, los factores educacionales y psicosociales moduladores del dolor, etc. En definitiva, muchas cosas que deben ser valoradas frente a un dolor lumbar.
La interpretación errónea está sucediendo por una coincidencia en la temporalidad de los hechos. Yo me hago una prueba de imagen porque me duele la zona lumbar (no te derivan a resonancia si no tienes dolor lumbar). Esto mismo ocurre con el dolor lumbar. Te diagnostican una alteración en el momento que coincide con tus dolores lumbares, pero porque es en ese momento en el que te realizas la prueba. Lo mas probable es que esa alteración que acaba de salir a la luz y lleve contigo mucho más tiempo de lo que crees.
Esta entrada ha sido realizada por nuestra fisioterapeuta Marta Jimenez. No dudes consultar para cualquier aclaración o para solicitar una cita.